1. Corrección: El arte de pulir tu manuscrito.
En la autopublicación como en el mundo editorial convencional, la corrección es como la gran cita antes del baile de graduación: quieres que todo esté perfecto. Y no hablamos solo de ortografía y gramática, sino de esa corrección de estilo que hará que tu texto fluya como un río en primavera. ¿Acaso no te has encontrado leyendo un libro y pensando este diálogo suena más falso que un billete de tres euros? Eso es lo que quieres evitar. Si tu calidad como escritora no es aún suficiente, no dudes en contratar la corrección de estilo. Nadie nace enseñada, pero tu libro debe ser la mejor versión posible. Es tu debut, tu tesoro y hay que pulirlo como el oro.
Un corrector profesional es ese amigo que te dice que tienes algo entre los dientes antes de una foto. Te señala los lugares donde tu narrativa hace aguas, donde tu personaje cambia de nombre (¿era Ana o Anna?), y esos tiempos verbales que decidieron hacer su propia fiesta. No escatimes en esto. Un libro sin errores es como un unicornio en el mundo de la autopublicación: raro y mágico.
Hagamos magia todas juntas y consigamos que los unicornios corran por el mundo de la autopublicación.
Una buena corrección te dignifica como escritora y dignifica tu obra. Corrige tu libro.
2. Maquetación: Más que solo texto en páginas.
La maquetación es ese eslabón olvidado que puede elevar tu libro a la categoría de arte. ¿Están las líneas demasiado cerca entre sí? ¿La letra es demasiado grande? ¿O es tan microscópica que hay que mirarla con lupa? ¿Has pensado en los tipos de letras que se utilizan tradicionalmente en el mundo editorial? Todo esto es muy importante, aunque no te lo parezca en un primer momento.
Piensa en la maquetación como el traje de tu libro para la gala de los Óscar: debe ser elegante, cómodo y hacer que tu historia brille. Los detalles importan, desde el número de página hasta esos espacios extra que se cuelan antes de un punto. Una buena maquetadora es como una directora de orquesta asegurándose de que cada elemento esté en armonía. Si eres de las que tocaban la flauta como si estuvieras estrangulando a un pato, eso no es lo que quieres para tu libro.
Tras la maquetación, en el momento en el que tengas que elegir el tipo de papel para tu obra, si no es que lleva ilustraciones a color, no tengas dudas, el papel que estás buscando es el ahuesado (color crema en el argot de Amazon). No uses el blanco a no ser que pretendas cegar con cada página a todas las personas que lean tu libro.
Ahuesado siempre es mejor 🙂
3. Diseño de Portada: La primera cita con tus lectoras.
La portada es el primer beso, ese que nunca se olvida. Es lo que atrae a las lectoras cuando pasan virtualmente por la inmensidad de Amazon o cualquier otra plataforma, o lugar en el que vean tu libro. No puedes simplemente poner el título en Comic Sans y esperar que llueva el amor. Tu portada debe comunicar el alma de tu libro a gritos.
Una diseñadora de portadas no solo debe ser una artista, sino también una estratega del mercado. Debes saber que una imagen vale más que mil palabras y usar esas mil palabras para contar la historia de tu libro de un solo vistazo. Las portadas que se destacan son aquellas que capturan la esencia del contenido y seducen a la audiencia, haciendo que deseen sumergirse en sus páginas.
Consigue un buen diseño y no publiques una cutrada, tu libro debe ser tan bonito por fuera como por dentro.
4. Marketing Digital: El grito en el viento digital.
El marketing digital para una autora autopublicada es como gritar desde la cima de una montaña esperando a que alguien te escuche. Y en la era de la información, es fácil que tu voz se pierda en el eco. Por eso necesitas estrategia: utiliza palabras clave (SEO) para que los motores de búsqueda sean tus mejores amigos, crea campañas de publicidad pagada en redes sociales si puedes, y sobre todo, construye una comunidad. La comunidad es el sustrato sobre el que plantarás el árbol de tu carrera, asegúrate de cuidarlo bien, regarlo y que esté bien nutrido.
Una buena estrategia de marketing digital implica también medir, aprender y adaptar. ¿Qué publicaciones obtienen más interacción? ¿A qué hora están tus lectores en las diferentes redes sociales? ¿Qué les gusta, qué comparten, qué los motiva a hacer clic en comprar? La clave está en entender y aprovechar estas métricas para tomar decisiones inteligentes sobre cómo promocionar tu libro.
5. Presencia en Redes: Tu escaparate virtual.
Tus perfiles en redes sociales son tu identidad digital, la forma en la que el mundo te ve. Cada publicación en Instagram, cada video en TikTok es una oportunidad para mostrar no solo tu libro, sino también quién eres. Los lectores de hoy en día quieren conectarse con el autor tanto como con la historia. Si les gusta la persona a la que ven a través de la pantalla, querrán leer tus historias.
Comprométete con tus seguidores. Publica regularmente, responde a los comentarios, participa en conversaciones. Usa las redes para contar tu viaje como escritora, tus éxitos y fracasos, tus inspiraciones. Convierte tus perfiles en un diario interactivo y una fuente de contenido que mantenga a tu audiencia esperando el próximo capítulo.
6. Colaboraciones: Alianzas estratégicas.
¿Sabías que la unión hace la fuerza? Bueno, en el mundo de la autopublicación, hacer equipo con influencers de Bookstagram o Booktok puede ser el equivalente a un lanzamiento de cohete para tu libro. Estas colaboraciones te permiten llegar a un público más amplio y ganar credibilidad dentro de la comunidad lectora.
Elige a tus colaboradores sabiamente. Busca influencers cuya audiencia coincida con el público objetivo de tu libro. Pero ojo, hay mucha gente con un morro que se lo pisa. Investiga un poco a quién le mandas tus libros. Nadie quiere invertir dinero y tiempo en una colaboración que no llegará a suceder jamás. Algunas influencers del mundo literario no son todo lo serias que cabría esperar.
Y para terminar con este apartado, ofrece valor, no solo una copia gratuita de tu libro, cosas como la oportunidad de participar en tu proceso creativo o directos contestando las preguntas de tus lectoras. La autenticidad y la reciprocidad son claves aquí.
7. Mentalidad: La maratón mental de la autora independiente.
Y por último, pero no menos importante, está la mentalidad. La autopublicación es una maratón, no un sprint. Prepara tu mente para el rechazo, la crítica y también para el éxito. Mantén un equilibrio entre la confianza en ti misma y la humildad para aceptar y aprender de los feedbacks.
Una opinión negativa dice más de la persona que lee tu libro que de tu obra en sí, la visión de cada persona es subjetiva. No te tomes las cosas tan a pecho como para que te hagan daño. Y aunque de esto no se suele hablar, cuida tu salud mental y emocional. Celebra cada pequeña victoria y aprende de cada fracaso. Rodéate de una comunidad de apoyo, ya sea en tus propias redes sociales o con un grupo de escritoras y escritores que comprendan perfectamente las cosas que pasan en el mundo de la autopublicación.
Recuerda, la resiliencia es tu mejor amiga.
Espero que estos pequeños consejos te ayuden a vivir la autopubliación de tu libro como algo mucho más positivo y que guíen este bonito viaje.
No dudes en dejar un comentario con tus observaciones o dudas 😉